Por delante aviso que son un par de entradas un tanto largas, así que si el tema del correr no es lo tuyo, puedes pasar a la siguiente entrada que publique.
Llegó el día, llegó la hora. Después de meses de entrenamientos y de carreras preparatorias, el 13 de Noviembre me esperaba la carrera de 20km para la que me había preparado.
Mucho viento y mucho calor. Raro en estas fechas pero no viendo el Otoño que llevamos. A las 9:30 ya estábamos en el barrio fronterizo de Behobia. Quedaba mucho tiempo por delante hasta las 11:30, hora prevista de salida más o menos. Había cogido una hora antes el tren desde Lasarte, pero no penséis que el tren fuera tranquilo. Hasta arriba de gente y con un ambiente de “Running” muy noble. La gente hablando de sus inquietudes, de sus dudas, de sus miedos, todo en un ambiente como digo muy bueno.
En Behobia me encontré con mi cuñado y con unos amigos suyos que venían desde Bilbao el mismo día. También me encontré con mi compañero de trabajo Juan Antonio, que también venía en el autobús desde Basauri. Todos con el “buzo” de correr los 20kms.
Después de cambiarnos y dejar las pertenencias en el camión que nos correspondía hablamos un poco y nos fuimos a calentar, no mucho, ya que después nos esperaba una buena tanda de kilómetros, pero bueno, algo de calentamiento es necesario. En la salida nos juntamos los 20.000 corredores que íbamos a tomar la salida, así que el ambiente era espectacular, música, gente disfrazada, el chico de la megafonía animando a todos… una gozada vamos. Tal vez el handicap del calor y del viento sur no se veía fuera a ser tan duro pero no hacían más que avisarnos desde la megafonía de que no olvidáramos la hidratación ya que aunque existen avituallamientos cada pocos kilómetros, el desgaste en estas carreras es muy alto.
Y a las 11:30 aproximadamente cruzamos la salida para recorrer el camino que nos separaba Irún de Donostia…
